Zombies party

Resumen

La vida de Shaun es un callejón sin salida. Se pasa la vida en la taberna local, "The Winchester", con su íntimo amigo Ed, discute con su madre y descuida a su novia, Liz. Cuando Liz le deja plantado, Shaun decide, finalmente, poner su vida en orden: tiene que reconquistar el corazón de su novia, mejorar las relaciones con su madre y enfrentarse a las responsabilidades de un adulto. Pero, por desgracia, los muertos están volviendo a la vida, y tratan de devorar a los vivos. Así que Shaun tendrá que enfrentarse a un problema más. Armado con un palo de cricket y una pala, emprende una guerra sin cuartel contra una horda de zombies para rescatar a su madre, a su novia e incluso, aunque a regañadientes, a su padrastro,  llevándolos a todos al lugar más seguro y protegido que conoce: "The Winchester"

Crítica

Zombies party, la desafortunada traducción de Shaun of the dead es una afortunada parodia de aquel clásico de los zombies de Romero.

La película está llena de divertidas referencias convirtiendo los sustos de las antiguas películas de género en situaciones graciosas, sin embargo no faltan los momentos de sangre y gore. 

A pesar de ser una comedia con tintes paródicos nunca cae en las bromas fáciles como otras películas, sino que todo está rodado con mucha clase y mucho estilo.

La estructura es similar al El amanecer de los muertos sustituyendo el centro comercial por una taberna típicamente inglesa.

Si hubiera que resaltar una escena por encima de las demás hay que mostrar especial atención al uso del apaleamiento de un zombie al ritmo de Don´t stop me now de Queen.

Como siempre los dos actores principales demuestran una química estupenda, rodeados de secundarios de lujo como Bill Nighy, un asiduo del cine británico.